Pasos para usar orinal y retirada del pañal
Abandonar el pañal es un gran paso en la vida de un bebé, y un signo de que ya se nos está haciendo un poquito mayor.
Y, aunque es cierto ningún niño deja el pañal sin estar preparado, sí necesita tu ayuda para conseguirlo.
De hecho, fueron necesarios toda clase de cuidados para cambiar el pañal a tu bebé recién nacido, ¿o no?
Pues esto no es diferente.
Por eso, aquí te explicaremos los pasos que debes seguir para el uso del orinal o reductor WC tras la retirada del pañal: ¡el momento más esperado!
Indice
¿Qué edad es la adecuada para quitar el pañal?
Desde el punto de vista neurológico, un peque de entre 2 y 3 años ya está listo para dejar el pañal.
De hecho, a los 2 años ya pueden controlar el esfínter anal, y, con la orina mientras están despiertos, el cambio sucede a partir de los 2 años y medio, y los 3 años (aunque controlarla mientras duermen puede tardar un poco más).
Por supuesto, hay niños que lo consiguen antes, y otros después.
Es por eso que debes prestar atención a las señales.
¿Qué señales son estas?
Algunas de las más importantes son las siguientes:
- Quiere quitarse el pañal cuando está mojado.
- Empieza a pedir ir al baño.
- Hace gestos o señales, se agacha, etc. para indicar que tiene ganas de hacer caca o pipí (o lo dice con esas mismas palabras).
- Muestra interés o te imita cuando vas al baño.
- Aguanta 3 o 4 horas sin orinar.
- Otras señales parecidas…
Esto, como es natural, no ocurre de un día a otro: se trata en realidad de una transición, un aprendizaje del pequeño al que debes prestar mucha atención.
8 pasos para dejar el pañal estilo Montessori
El método Montessori es un modelo creado por la educadora y médica italiana María Montessori a fines del siglo XIX y principios del XX.
Se basa en acondicionar un entorno ideal para el desarrollo de los niños: en este entorno, todo está ordenado, y es agradable a los sentidos y funcional.
La idea es motivar al niño, y darle la oportunidad de tomar responsabilidad y compromiso por sus propias acciones.
Ahora bien, ¿cómo se aplica el estilo Montessori para dejar el pañal…?
Con los siguientes 8 pasos, que debes ir siguiendo de manera secuencia, es decir empezando por el primero y terminando por el octavo:
1. Cambiarle siempre el pañal en el baño, nunca en otro lugar.
2. Siempre ponerlo de pie para cambiarle el pañal (aunque puede parecerte algo complicado, te darás cuenta de que en realidad es más fácil que acostado).
3. Deja que el niño te acompañe al baño, para que aprenda a seguir tu ejemplo (recuerda que él o ella quiere ser como tú),
4. Regálale su propio bañito con su propio papel, toallitas húmedas, un bote de basura pequeñito y otros accesorios de baño para que se siente contigo mientras vas al baño.
5. Cuando esté listo para dar el gran paso, no lo pospongas: ¡apóyalo!
6. Despídete de los pañales entrenadores, ¡esto es crucial!
7. Nunca hagas comentarios negativos (burlas, ofensas, retos, etc.) si el niño se cae o tiene algún accidente.
8. Acompaña a tu niño al baño para que no se sienta solo, al menos las primeras veces.
Con estos pasos, ya el niño realizó la transición y puede valerse por sí mismo.
El truco aquí radica realmente en saber qué es mejor, si un reductor WC o un orinal.
Sobre esto hablaremos a continuación…
Orinal vs. reductor WC: ¿cuál es mejor para sustituir el pañal…?
Algunas personas consideran que los orinales son mucho mejores que los adaptadores WC, porque el niño puede apropiarse de él como lo hace con sus juguetes, y tener una relación más estrecha con este accesorio.
Además, suelen venir en diseños llamativos y divertidos, y, como están en el suelo, el miedo del niño se reduce.
El inconveniente principal es que hay que limpiarlo, cosa que no sucede con el reductor de váter.
Este tiene la ventaja de que permite al niño adaptarse más rápidamente al inodoro, y ya de paso le será útil fuera de casa, cuando no tenga al alcance su orinal.
Pero también le causa más miedo, ya que no está acostumbrado a tener los pies y piernas en el aire, y esto puede dificultarle mucho hacer pipí o caca.
De cierta forma, es parecido al escoger bañeras para bebé: necesitas conseguir que se sienta lo más seguro posible.
Con la elección entre orinal y adaptador WC pasa lo mismo.
Entonces, ¿cuál es mejor para dejar el pañal?
La mayoría de los pediatras recomiendan el orinal.
Pero siempre es bueno darle opciones al niño, así que obsérvalo y descubre junto con él cuál funciona mejor.
Recuerda que sin prueba y error no hay aprendizaje.
Algunos trucos para dejar el pañal…
Durante la transición del pañal al orinal o reductor WC, te recomendamos acudir a estos trucos para ayudar a tu nene a dejar el pañal:
- Vístelo con ropa suelta y fácil de quitar, para que desarrolle autonomía cuando tenga ganas de hacer pis o caca.
- Si se ensucia, no lo castigues ni le dejes la ropa sucia.
- Deja que tire la cadena si usa el adaptador WC.
- Comienza a ponerle ropa interior tan pronto haya aprendido a usar bien el orinal.
- Si el niño sufre de estreñimiento, hazle tomar más agua y dale más fruta y verdura para mantener las deposiciones blandas.
- Cuando el niño haya dejado el pañal por el día, ya puedes quitar el de la noche y en la siesta.
- ¡Ve despacio! Respeta siempre el ritmo natural de tu niño: si le quitas el pañal muy rápido, puede ser traumático para él.
- Siempre dale opciones y la oportunidad de hacerse responsable de sus propias necesidades fisiológicas.
- No exageres en felicitaciones: es importante que la vida de la familia gire en torno al orinal, así que felicítalo pero sin pasarte, y evita las frases del tipo “ahora ya eres un niño mayor” y otras similares.
Esperamos que con estos consejos y trucos para dejar el orinal, ya sepas que hacer si el niño está dando las señales adecuadas.
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