Consejos al escoger bañeras para tu bebé
El baño es fundamental para la salud y la higiene de tu bebé y las bañeras han sido parte de las rutinas de baño del ser humano por muchos siglos. Además, es la manera más práctica de bañar a un bebé. De hecho, tal es su importancia que hoy día disponemos de una gran variedad de bañeras para bebés en el mercado.
Cada uno de ellas se ha diseñado para suplir una necesidad específica de la mamá y el bebé, para que, en cada baño, ambos se sientan realmente cómodos. Sin embargo, tanta diversidad a veces pudiera resultar abrumadora, y en lugar de ayudarnos, nos hace más difícil la elección.
Muchas veces necesitamos consejos al escoger bañeras para tu bebé que nos salven de tanta confusión. Por esa razón hemos escrito para ti este post, a fin de ayudarte a elegir la bañera que les ayude a tener una rutina relajante y estimulante al momento del baño.
Indice
La importancia de escoger la bañera para tu bebé adecuada
Bañar al bebé en un lugar que sea apto y seguro para él es de vital importancia. Contar con una buena bañera evitará posibles accidentes, especialmente porque el baño se siente como uno de los momentos más complicados durante el día de una madre primeriza y su recién nacido.
Sostener al bebé, a la vez que intentamos ponerle los productos de baño, mientras se evitan los deslizamientos al enjabonarlos, cuidar que la temperatura no baje tanto, evitarle el jabón en los ojos, aclarar y retirar correctamente el champú, sacarlo con cuidado para secarlo y volverlo a vestir. En definitiva, una tarea que en lugar de ser relajante, parece bastante estresante ¿no es cierto?
La buena noticia es que contar con la bañera adecuada puede dar solución a muchos de estos pequeños problemas, y puede llegar a ser la ayuda apropiada para pasar de todo el estrés de no saber cómo multiplicar tus manos, a un momento completamente relajante, que incluso puede hacer que tu bebé se duerma con más facilidad.
Características que debes tener en cuenta a la hora de elegir la bañera de tu bebé
Indiferentemente del tipo de bañera que elijas, necesitarás tener en cuenta las siguientes características:
- Debe ser de plástico grueso, para que no se rompa con el peso del agua o del bebé.
- Es recomendable adquirir una bañera que se ajuste a su crecimiento, para que pueda ser cómoda y útil por más tiempo.
- No debe poseer bordes ásperos o rectos que pudieran hacerle daño al bebé.
- Son preferibles las bañeras que tienen un tapón para la salida del agua.
- Debe contar con una superficie antideslizante.
Tipos de bañeras para bebé
Tal como ya lo mencionamos, existen muchos tipos de bañeras. Podrás encontrar desde las más sencillas, esas que se asemejan a un cubo de plástico, hasta las más completas, que son como una especie de muebles conocidos como bañeras cambiador.
Estas últimas suelen ofrecerte espacio suficiente para guardar las cosas del bebé y para cambiarlo. Por supuesto, de las dos opciones, esta última es la más voluminosa, por lo que, antes de elegir una bañera, por más prestaciones que esta te ofrezca, debes evaluar el espacio con el que cuentas para colocarla.
Así que, conozcamos los tipos de bañeras que existen y cuál se adapta mejor a nuestras necesidades:
1. Bañera cambiador
Comencemos con la bañera más práctica y funcional. Este tipo de bañeras van colocadas sobre una estructura de metal que se ubica, aproximadamente, a la altura de la cintura o cadera de los padres, según la estatura de estos.
Encima de esta estructura, va colocado el cambiador de manera superpuesta y con una apertura abatible. Ten la certeza de que tanto el cambiador como la bañera se ubican a una altura que te permitirán sentirte cómodo a la hora de bañar o cambiar a tu bebé.
Este tipo de bañeras dispone regularmente de una bandeja multiusos, donde podrás guardas todos los accesorios de baño de tu bebé, como el gel, el champú, la toalla, los pañales y hasta el arrullo. Hay modelos que incluso pueden ser trasladados de un lugar a otro.
Por supuesto, si quieres optar por una bañera cambiador, debes asegurarte que cuentas con el suficiente espacio para ello.
De hecho, hay bañeras cambiador que incorporan una cómoda, es decir, un mueble compacto con cajones, cuyo diseño encaja perfectamente con la decoración de la habitación, por lo que puede ser ubicado dentro de ella junto con la cuna de tu bebé, el cochecito, etc. Algunos modelos incluyen ruedas para ser desplazados del cuarto del bebé al baño y viceversa.
Ahora bien, la mayor ventaja de este tipo de bañera cambiador, es que una vez se terminen las labores sobre la bañera y el cambiador, podrás seguir utilizándola para guardar la ropa de tu bebé.
2. Bañera cubeta
Las cubetas se encuentran diseñadas con una forma completamente anatómica, a fin de que el bebé se adapte a ella y pueda sentirse seguro y relajado durante su baño.
Las bañeras cubetas son ideales para los espacios reducidos. Hay algunos modelos que incluyen un soporte metálico que evitará daños en la postura de tu espalda. Esta estructura además es muy fácil de guardar, tan solo deberás plegarla y dejar la cubeta del bebé dentro de tu propia bañera, así que no ocupará espacio extra.
Y aunque estas bañeras no incluyen la función de cambiador, son igualmente útiles para bañar a tu bebé de manera segura.
3. Bañera de viaje
Este tipo de bañeras son ideales para cuando sales de vacaciones, ya que no pesan y ocupan muy poco espacio. Podrás utilizarlas dentro de tu bañera o sobre una superficie sólida. La mayor ventaja que ofrecen es su portabilidad, pero también vale destacar que este tipo de bañera puede serte útil hasta que tu hijo cumpla 4 años aproximadamente.
Lo cierto es que escoger la bañera de tu bebé dependerá básicamente del espacio que tengas en casa, y de las necesidades que quieres que tu bañera cumpla. En nuestra selección encontrarás las mejores marcas y modelos que se adaptarán a ti y a tu bebé dándoles total comodidad y confort durante la hora del baño.
Por último, no dejes de conseguir todo aquello que tu bebé necesita para sus necesidades higiénicas, como orinales y adaptadores WC, o accesorios de baño como cambiadores, esponjas, peines de nylon, etc. Recuerda que la limpieza del niño es imprescindible siempre, pero sobre todo a estas edades, cuando su sistema inmune aún no se ha desarrollado lo suficiente y necesita estar lo más protegido posible de gérmenes y bacterias.