¿A partir de que edad puede viajar en avión un bebé?, y ¿qué hay que tener en cuenta?

Cuando, como padres, nos proponemos viajar con nuestros hijos, es inevitable ponernos nerviosos. Aún más si es nuestro primer viaje en avión con el bebé y no sabemos a partir de que edad puede viajar ni qué hay que tener en cuenta para hacerlo.

Ten en cuenta siempre que los bebés son imprevisibles y nunca se sabrá a ciencia cierta cómo van a reaccionar esa primera vez. De hecho, nadie, ni bebé ni adulto, sabrá cómo será ese primer viaje en avión. Pues, aquí tenemos una pequeña guía a considerar siempre que necesites viajar en avión con tu bebé. De esta manera podrás estar lo mejor preparado posible.

¿A partir de qué edad se puede viajar en avión con un bebé?

Por lo general, no se recomienda que, ni mujeres con más de 6 meses de embarazo ni recién nacidos viajen en avión, a no ser por motivos de extrema necesidad. Sin embargo, es solo una recomendación. Los que establecen a partir de qué edad puede viajar un bebé en avión son las propias aerolíneas, o el médico del niño.

Cada aerolínea tiene su fecha mínima. Los rangos, por lo general van desde las 48 horas de nacido hasta los 14 días. Sin embargo, casi todas recomiendan viajar después de cumplida la primera semana de vida.

No obstante, no hay edad establecida a partir de la cual se puede o no se puede volar con un bebé. Al igual que aprendiste cómo enseñar a nadar a tu bebé desde edades bien tempranas, para que se adapte al medio acuático y no le tema, lo mismo sucede con volar en avión. Cuanto más pequeño lo haga mucho mejor. De hecho, la mejor edad para viajar con ellos es antes de los 6 meses de edad, a partir de ese tiempo, son más inquietos y puede que no duerman nada en el avión.

¿La presión, altura y demás no le afectan?

Por supuesto que le puede afectar; a algunos más, a otros menos, y talvez nada a otros. A todo ser viviente lo afecta el cambio de presión. Sin embargo, las cabinas de los aviones van presurizadas para que el viaje sea lo más cómodo para todos. No obstante, puede que sí sufran del dolor de oídos debido al cambio brusco de presión al aterrizar o despegar.

Puedes hacer una cosa para que eso no suceda. A partir de que te montes en el avión para viajar con tu bebé, si está en edad de amamantar, puedes darle el pecho. El efecto de la succión hace que se igualen las presiones y no se les tapone el oído. Es más o menos lo mismo que realizan los adultos al descompresionar, ya sea mascando chicles, bostezando o de otra manera. Si el bebé no toma pecho, los biberones surten el mismo efecto. Puedes hacerlo antes y durante el despegue o aterrizaje.

¿Qué se debe tener en cuenta al viajar en avión con un bebé?

Algo de esto adelantamos en nuestro artículo “Consejos para viajar con bebés y niños”, pero en él, hablamos de varios medios de transporte, no solo del avión. Por tanto, en esta relación de cosas a tener en cuenta para viajar en avión con un bebé, independientemente de su edad, lo haré a partir de lo dicho en el artículo. O sea, no repetiré consejos, sino que daré otros nuevos.

Sigue todas las políticas de la aerolínea en que viajas

Cada aerolínea tiene sus propias reglas. Como ya dijimos antes, la edad a partir de la cual puede viajar tu bebé en su avión, puede variar de aerolínea en aerolínea. Además, hay otras regulaciones que varían.

Por ejemplo: Cuando son menores de dos años no pagan asiento, por tanto, no tienen derecho a uno. Viajan en el regazo de la madre o padre. Sin embargo, sí pagan seguros de viajes y estos varían mucho. Los importes van desde los 25,00 hasta los 35,00 euros por bebé. Sin embargo, algunas aerolíneas cobran el 10% del valor de la tarifa.

Al no tener asiento, no tienen derecho a equipaje. Sin embargo, algunas aerolíneas permiten llevar un bolso de bebé con los artículos imprescindibles. El tamaño y peso es diferente en cada una.

A partir de que buscas el pasaje de avión, elige el lugar más cómodo para viajar con tu bebé

Busca la fila del avión que tenga más espacio. Aléjate de los asientos con salida de emergencia. Además, debes tratar de estar lo más cercano a la ventana posible y lejos del pasillo. A partir del despegue del avión, comienzas a viajar, por tanto, puedes crear juegos con tu bebé y mostrarle el paisaje. Además, si se siente inquieto, puede relajarse mirando por la ventanilla.

Otra razón es que, por el pasillo pasan los carritos de servicio con bebidas y comidas. Esto puede ser peligroso para el bebé, ya que las bebidas pueden derramarse sobre el bebé, o ser golpeados por los carritos de servicio. Para no hablar de que estos asientos del pasillo quedan justo abajo del compartimiento de equipajes.

Mantén al bebé bien abrigado

La temperatura del avión puede ser baja y variar mucho. Sobre todo en vuelos largos o cuando tienen que esperar mucho tiempo en la pista. Por tanto, debes procurar que esté bien abrigado, y con ropa que facilite el cambio del pañal. De hecho, lo ideal será realizar el cambio de los pañales antes de abordar el vuelo.

Tenga juegos, juguetes o cualquier cosa para distraer al bebé

Lo ideal, como una vez dijimos, es viajar de noche con el bebé o menor de edad, o partir con él dormido. Sin embargo, si se despierta, es bueno tener juegos o juguetes de bebés para mantenerlo entretenido. Los tablets, celulares o videojuegos, como tal, son una magnífica opción. También recuerda que la voz de los padres tiene un efecto tranquilizador en los hijos. Por tanto, puedes leerles o crearles cuentos, y si son interactivos mucho mejor.

Pide ayuda siempre que la necesites

No temas pedir asesoría para viajar con tu bebé en avión y siempre indícales su edad, incluso antes de partir de viaje. Realiza todas las preguntas que tengas y pide todo lo que necesites. Quizás tengan todo lo que precises para que tu viaje sea maravilloso y cómodo: tal y como tú y tu bebé merecen.